Decidir dónde colocar el papel pintado en el salón puede ser un desafío. Surgen dos preguntas clave: ¿cuántas paredes empapelamos? y ¿cuáles son las más adecuadas? A continuación, te ofrecemos una guía para ayudarte a tomar la mejor decisión.
1. Empapelar una, dos paredes o todo el salón
Hoy en día, el uso del papel pintado se ha limitado a una o dos paredes, ya que cubrir todo el salón puede resultar abrumador. Lo ideal es empapelar dos paredes contiguas, en lugar de enfrentadas, ya que esto proporciona una sensación de continuidad y unidad en la estancia. Esta continuidad contribuye a la amplitud del salón y permite destacar las áreas empapeladas. Es recomendable elegir papeles pintados más neutros para esta opción; en cambio, los diseños llamativos son más apropiados para una sola pared.
2. Elegir la pared principal
La pared principal es aquella que atraerá la atención al entrar en la habitación. Es aconsejable seleccionar una pared con buena visibilidad frontal, lo que permitirá apreciar el diseño del papel. Esta pared puede estar detrás del sofá o ser la que da al comedor, creando una continuidad en el espacio.
3. Zonas de uso y delimitación
Elige la pared que te ayude a diferenciar las distintas áreas de uso. Por ejemplo, empapelar la pared que se encuentra más centrada respecto al comedor o la que está detrás del sofá. Esto permitirá que cada zona tenga su propia identidad y se sienta más acogedora.
4. Evita las paredes con ventanas y puertas
Las paredes que contienen ventanas o varias puertas no son las más recomendables para empapelar, ya que, por un lado, se pierde el espacio que ocupan la puerta o la ventana; y, por otro, la luz natural puede afectar la visibilidad del papel, lo que dificulta apreciar su diseño con claridad.
5. Destacar muebles y elementos clave
Identifica los muebles o elementos decorativos que desees resaltar. Si tienes una pieza especial, como un sofá o una obra de arte, empapelar la pared detrás de ella puede crear un contraste que potencie su presencia.
6. Papel y pintura: la combinación perfecta
Pintar el resto de las paredes del salón en un color que complemente el fondo del papel pintado es una excelente manera de integrar el diseño en el espacio. Esta técnica no solo resalta el papel, sino que también crea un ambiente armonioso. Al elegir un tono que complemente el papel, lograrás una cohesión estética que unificará todo el salón.
7. Consideraciones sobre el diseño
El tamaño y el patrón del papel pintado son factores cruciales. Si el salón es amplio, opta por papeles con diseños grandes para evitar que la repetición resulte abrumadora. En espacios más pequeños, los motivos más diminutos son más apropiados, ya que evitan que el diseño se pierda.
Conclusión
Elegir la pared adecuada para empapelar en el salón implica considerar la visibilidad, el diseño y cómo cada elemento del espacio interactúa. Siguiendo estos consejos, podrás transformar tu salón en un espacio único y lleno de estilo.
